SERVICIO DE ALIMENTOS Y LA IMPRESIÓN DEL COMENSAL.

por | Jul 30, 2021 | Inocuidad de Alimentos | 0 Comentarios

Dentro de las cartas de presentación de todos los establecimientos tenemos el servicio que ofrece nuestro personal de la primera línea, el personal encargado de la atención hacia el cliente, ya que gran parte de sus actividades influirán en el retorno del comensal.

Generalmente en una encuesta de satisfacción del servicio de alimentos se evalúa el tiempo de atención, higiene de las instalaciones, actitud del personal, calidad de los alimentos, limpieza del personal y temperatura de los alimentos de bufet.

Por otra parte, el comensal busca establecimientos que cumplan con los protocolos de higiene, pero no solo que cumplan, sino que los lleven a cabo. Los errores más comunes en las prácticas de higiene durante el servicio son:

  • Tapetes sanitizantes sucios o en el peor de los casos, vacíos.
  • Pisos sucios sin un programa de limpieza periódica en el servicio.
  • Mesas sucias sin un control sobre su uso.
  • Personal que no conoce las prácticas de higiene mínimas que debe brindar en la atención al comensal.
  • Mal uso del cubrebocas; una mala colocación, usar solo al ver al comensal y en el peor de los casos cubrebocas sucios.
  • Personal con uñas largas, uniforme sucio y omisión del lavado de manos.
  • Falta de limpieza en las áreas de servicio y baños, entre otros,

Estos factores afectan la imagen del establecimiento al dar una mala impresión al comensal.

Como resultado de un buen cumplimiento podemos tener beneficios en el servicio de alimentos como:

  • Confianza del comensal.
  • Retoro del comensal.
  • Fidelidad de consumo.
  • Se transmiten los buenos hábitos de higiene.
  • Prevención de enfermedades.
  • Brindar alimentos de calidad.
  • Diferenciación en el mercado.

Parte de estos requisitos señalados para la nueva normalidad son compatibles con la NMX, para dar un buen cumplimiento y mejorar la imagen del establecimiento, te recomendamos los siguiente:

  • Capacitar al personal en buenas prácticas de higiene.
  • Realizar recorridos de supervisión de las áreas.
  • Evaluar constantemente el conocimiento del personal en temas relacionados a la higiene y calidad del servicio.
  • Capacitación sobre los procesos de limpieza y desinfección, cuando aplicarlos.

Para dar cumplimiento a las exigencias de los comensales se debe trabajar en detalles, los cuales no siempre están enfocados en el costo, sino en hábitos de trabajo, la supervisión y evaluación continua es la mejor forma de mantener los estándares de calidad.